Congratulations! Your support has been successfully sent to the author
avatar
El trabajo de Hércules

El trabajo de Hércules

Published Aug 18, 2025 Updated Aug 18, 2025 Historical
time 1 min
0
Love
0
Solidarity
0
Wow
thumb 0 comments
lecture 1 reading
0
reactions

On Panodyssey, you can read up to 10 publications per month without being logged in. Enjoy7 articles to discover this month.

To gain unlimited access, log in or create an account by clicking below. It's free! Log in

El trabajo de Hércules

“Hércules, querido, ¿no has visto mi mantel? ¿Ya sabes, ese mantel blanco, lindamente bordado que pongo en la mesa de la sala?”

Hércules se puso muy incómodo, por una vez que estaba tranquilo, su madre tenía que venir a molestarlo. Muy concentrado en sus trabajos, reflexionaba sobre planes complicados para vencer a la Hidra de Lerna, luego a Cerbero, en seguida las caballerizas del asqueroso Augias.

“Hércules, ¿te has puesto tus medias? Con este clima póntelas por favor, ¡sabes bien que tienes los pies sensibles!”

A pesar de ser estoico, Hércules hervía por dentro. “Doce trabajos era demasiado simple, no contaban con mi madre.” Pero luego retomó sus reflexiones: “Para el león de Nemea, paso por detrás, lo pincho en el flanco, luego retrocedo, un golpe por la derecha, un golpe por la izquierda, ¡y eso es todo!”

“Cariño, ven a ayudarme con los platos, sabes bien que el agua fría es mala para mi artritis.”

Eso fue demasiado. Al borde de la crisis de nervios, Hércules se levantó de golpe. Algunas flores a la vista se pasmaron. Es cierto que de pie parecía más grande.

Hércules tronó: “Madre, ¿no conoces mi destino? ¿No ves los trabajos que me han dado? Soy Hércules y en el corazón de los hombres seré el héroe que ellos aclamaran por miles de años. ¡Déjame prepararme!”

De seguro no se esperaba lo que iba a seguir.

“Ah mi hombrecito, ¡no uses ese tono conmigo! Vas a comenzar por calmarte, luego me darás mi mantel, enseguida te pones tus medias y después vas a lavar la vajilla. No se por quién te tomas con tus trabajos, ¡pero por ahora obedeces a tu madre!”

La ebullición de Hércules desapareció en un instante. No estaba preparado para enfrentar esas energías. Un poco avergonzado, buscó una palabra para calmar la tempestad. Y terminó por encontrar dos palabras ampliamente utilizadas: “Si mamá.”

Una vez más, Hércules había sido vencido en el altar materno. Digamos en su defensa que todos los héroes habían tenido la misma suerte.


*****************************************************************************************************************************

Source : https://nepantla.net/L_C_66_esp.html

Image : gallica.bnf.fr

lecture 1 reading
thumb 0 comments
0
reactions

Comments (0)

You must be logged in to comment Sign in

Are you enjoying reading on Panodyssey?
Support their independent writers!

Prolong your journey in this universe Historical
Contacto
Contacto

Evidentemente, era la primera vez. Y los periódico...

Christophe De Beauvais
1 min
Contact
Contact

Évidemment, c’était la première fois. Et les journ...

Christophe De Beauvais
1 min

donate You can support your favorite writers

promo

Download the Panodyssey mobile app