

10 La muerte que no pasa
No puedes leer más publicaciones este mes sin iniciar sesión.
Para aprovechar al máximo las nuevas funciones, inicia sesión o regístrate haciendo clic a continuación, ¡es gratis!
Inicar sesión
10 La muerte que no pasa
Es extraordinario que no se haya notado. Por lo general, ella se aventuraba muy poco en el césped. Sin esconderse, quería ser discreta y no deseaba que se notara su presencia. Se la tenía en pensamiento y a menudo a distancia, con una mezcla de certitud y de peligro.
Sin buscar materializarse, a veces probaba los placeres del aviso y sucumbía a la felicidad de fundirse. Era entonces que aparecía. ¡Oh nada de grandioso en sus apariciones! Detestaba las puestas en escena y los pequeños efectos teatrales.
Preocupada en no mostrarse, ella se vestía sobriamente. El sol, como toda luz, la molestaba y entonces usaba un pequeño parasol que, según ella, le daba un aire coqueto.
¿Como creer que bajo esta sombra un fuego la consumía? La violencia de su postura se debía a su inmovilidad. No


No puedes leer más publicaciones este mes sin iniciar sesión.
Para aprovechar al máximo las nuevas funciones, inicia sesión o regístrate haciendo clic a continuación, ¡es gratis!
Inicar sesión